¿Sobrevivirá TikTok?

Cada vez que alguien me pide mi opinión sobre la posible prohibición de TikTok en Estados Unidos, respondo con la siguiente pregunta: ¿Has leído el texto de la ley?

Todavía no he recibido respuesta positiva a mi pregunta y no culpo ni juzgo a nadie. De hecho, nuestro tiempo es demasiado valioso como para tener la lectura de textos legislativos entre nuestras prioridades. Mucho menos si toda la jerga legal está en inglés.

Sin embargo, me tomé el trabajo de leer el “Protecting Americans from Foreign Adversary Controlled Applications Act” luego de que se aprobó en la cámara baja del Congreso de EEUU. Mi interés, para sorpresa de nadie, era saber y entender las condiciones que el Gobierno le impondría a Bytedance (propietario de TikTok) y cómo cambiaría el panorama de las redes sociales en este país. Por tanto, aquí hago un resumen corto de lo que esta ley (que Biden firmó el 24 de abril) representa para TikTok:

• El texto menciona literalmente a Bytedance y Tiktok, pero deja abierta la opción de aplicarse a cualquier “adversario extranjero” a discreción del presidente de EEUU.

• La ley considera a Tiktok una aplicación de propiedad de un “adversario extranjero” (foreign adversary). Para ser más claros: Bytedance responde a intereses del Gobierno Chino.

• La condición para que TikTok siga siendo legal en EEUU es vender sus intereses extranjeros (Bytedance) a una empresa que no se considere “adversario extranjero” (entiéndase una empresa americana).

• En el caso de no cumplir con la condición de compra-venta, la ley prohibirá que TikTok se ofrezca en las tiendas digitales en EEUU. Esto significa que, la Apple Store y Google Store la tendrían que retirar de sus plataformas. De facto, TikTok quedaría prohibido en EEUU.

• Bytedance tiene 270 días para vender su participación y evitar la prohibición de TikTok en EEUU.

ByteDance dará pelea

La empresa (que no cotiza en bolsa) se ha parado firme y ha iniciado ya una batalla legal para revertir el mandato de la ley. Así ByteDance pone su última esperanza en abogados, confiando que la corte falle a su favor.

Ahora bien, el proceso legal puede tomar varios meses (no me sorprendería si años), tiempo que ByteDance apenas tiene. La ley es clara sobre el límite para vender la empresa. Los 270 días comenzaron a correr desde que el texto entró en vigencia (24 de abril). Hay una posible extensión de 90 días que depende enteramente del presidente de EEUU.

En conclusión, TikTok podría desaparecer del mercado estadounidense en los próximos 12 meses.

Posibles compradores

No hay sorpresas entre los nombres de las empresas que suenan como potenciales ofertantes, en el caso de que ByteDance decida vender (más sobre esto en un momento). Microsoft, Walmart, Oracle encabezan la lista, seguidos de Meta y Google. Estos últimos con menos incentivos, pues una oferta para adquirir TikTok podría truncarse si la SEC (el regulador federal) interpreta la compra como un “monopolio” (ver antitrust en inglés).

Por el lado privado sí hubo una sorpresa: el exsecretario del tesoro de Trump, Steven Mnuchin, hizo público su plan para una potencial oferta. Poco después de que la cámara baja del congreso aprobara la ley, Mnuchin afirmó que estaba reuniendo inversionistas para tratar de comprar TikTok.

Con el pasar de los días, seguro tendremos muchos más potenciales compradores, probablemente desde el sector privado (al estilo de Mnuchin)

Ahora bien, todas las posibles ofertas podrían hacerse humo si ByteDance decide no vender y cerrar TikTok en EEUU.

ByteDance y su plan de quemar las naves

Vender TikTok representa más que solo cambiar una aplicación de un propietario a otro. Recordemos que los algoritmos (la organización del código fuente de una aplicación) son una parte crítica de todo software. Para entenderlo, pensemos en Coca Cola. Si quisiéramos comprar esta empresa, la receta original tendría que ser parte de lo que el vendedor nos entregue, porque obviamente vamos a querer producir la misma bebida de la que lucra la empresa que compramos.

Así como no podríamos producir Coca Cola sin su receta original, TikTok no funcionaría igual sin los algoritmos sobre los que opera la aplicación hoy mismo.

En este sentido, ByteDance tendría que entregar toda esta información a su comprador; pero es aquí donde comienzan los problemas, pues la empresa no estaría dispuesta a revelar la estructura de los algoritmos que hacen de TikTok la red que todos conocen. Al parecer, esta información estaría registrada en China bajo leyes de propiedad intelectual. Por tanto, tal vez la decisión de vender TikTok no sólo dependería de ByteDance, sino también de políticos chinos.

Así mismo, hay varias fuentes reportando que para ByteDance habría solo dos opciones: un triunfo en las cortes (anulando el mandato de la ley) o el cierre (la no venta) de la aplicación en Estados Unidos. Al parecer, el algoritmo es tan valioso para BytDance que preferirían salir del mejor mercado del mundo que entregarlo a una empresa americana.

Mi opinión y conclusión

No soy usuario de TikTok, por lo que su continuidad o cierre no me afectaría en lo más mínimo. Sin embargo, luego de leer el texto de la ley que ha pasado el Congreso de EEUU, veo con preocupación que se haya otorgado el poder de decidir qué aplicaciones están conectadas con “adversarios extranjeros” a una sola persona: el presidente de Estados Unidos.

Aunque el cierre de TikTok se ha vendido como una supuesta protección de la privacidad de datos de los usuarios en EEUU, los detalles adicionales en la ley no se limitan a una sola aplicación o empresa, sino que dejan puerta abierta para que cualquier presidente tome una decisión unilateral, sin contrapesos.

Además, en un sociedad libre, los individuos interactúan para persuadir o disuadir, alertar, promover, debatir y un largo etcétera. En este proceso nos equivocamos y aprendemos, cada uno a su paso. Ese es el ciclo saludable de la información de una sociedad sana.

En resumen, los usuarios adultos son responsables de lo que consumen y comparten. Por otro lado, los usuarios menores de edad son responsabilidad de sus padres o tutores legales. Por tanto, prohibir todo el contenido de una aplicación por ley es la forma menos eficiente de atacar un problema. En especial cuando las leyes exceden el alcance que tenía la idea original.

En definitiva, TikTok se juega su última carta (la legal) en las cortes, mientras sus usuarios en EEUU han comenzado a preocuparse ante la incertidumbre. Quienes vemos el show desde lejos, también tenemos el temor de que esta ley pueda ser el principio del fin de algo a largo plazo.

Un abrazo desde Houston,
Omar